Además de los clásicos aparatos de pesaje para grandes mercancías, como las básculas de suelo o las de palets, es bastante habitual necesitar una báscula compacta para los pequeños envíos. Se trata de aparatos prácticos y ligeros, que se pueden usar en cualquier rincón y que se pueden transportar sin el menor problema. No obstante, no todas son iguales, así que, a la hora de comprar una balanza electrónica, habrá que tener en cuenta algunos aspectos relevantes como el material o las funciones que integra.
El material de la plataforma de pesaje de estas básculas de sobremesa suele estar fabricado con acero inoxidable, un material especialmente resistente a la corrosión y que permite, pues, soportar la humedad. Es cierto que, en términos generales, el acero inoxidable no es especialmente liviano, pero se trata de dispositivos pequeños para cargas ligeras, por lo que no son especialmente pesados a la hora de transportarlos de un lado a otro del almacén. Además, las básculas, al igual que las otras herramientas de trabajo deben limpiarse correctamente y este material presenta la gran ventaja de que resulta muy fácil de limpiar.
Algunos modelos disponibles en Jungheinrich Profishop cuentan con un certificado IP42, lo que significa que están protegidos contra el polvo y las gotas de agua.
Al igual que pasa, en general, con otros tipos de básculas, estos modelos compactos suelen contar con un rango de pesaje, es decir, un peso mínimo y un peso máximo que son capaces de detectar o soportar. El mínimo parte de los 0,5 g, lo que indica una gran precisión, y el máximo peso soportado puede alcanzar los 15 kg. Las dimensiones de la plataforma de pesaje también son importantes, así que a la hora de elegir deberemos tener en cuenta el tipo de paquetes u objetos que solemos manejar. Podemos encontrarlas con un ancho mínimo de 15 cm hasta un máximo de 31 cm, y una profundidad que puede ir de los 12 a los 27,5 cm.
Algunas de las funciones que estas balanzas compactas pueden ofrecer son:
Estas básculas electrónicas suelen funcionar o bien con pilas, o bien conectadas a la red eléctrica, pero con acumuladores que funcionan a modo de batería. De esta manera, será posible trabajar con ellas en cualquier rincón del almacén o taller, o incluso dejarlas como parte del equipamiento de las estaciones de trabajo móviles de las que dispongamos. Algunos modelos incluyen, también, un puerto RS-232C, que permitirá conectarlos a una impresora o al PC en caso de necesitarlo.
Estas básculas digitales portátiles vienen con una pantalla LED integrada que nos permite ver no solo el resultado del pesaje, sino también la función que en ese momento tengamos activada y la unidad en la que estamos pesando (gramos o libras). El tamaño de esta pantalla puede variar de modelo a modelo, pero en general son lo suficientemente grandes para ver cualquier dato con claridad. Algunos modelos incorporan dos pantallas, una delantera y otra en el reverso, lo que las hace más versátiles.