Comprar una báscula puede parecer una tarea sin mucho misterio. No obstante, hay muchos aspectos a tener en cuenta: ¿Para qué tipo de mercancías la vamos a usar? ¿Queremos solo pesar o también necesitamos otras funciones? ¿En qué lugar la vamos a tener de manera habitual? Todas estas cuestiones serán importantes a la hora de decidir cuál elegir. Conocer los materiales de los que están hechas y sus opciones de conectividad también podrán ser de gran utilidad a la hora de decantarnos por un modelo u otro.
En Jungheinrich PROFISHOP podrá encontrar los siguientes tipos de básculas:
Son básculas de pesaje que, en vez de contar con la clásica plataforma de pesaje, disponen de un gancho en el que colgar la carga. De esta manera, el tamaño del elemento a pesar no es un problema, puesto que no hay ninguna limitación de superficie. Son muy ligeras, por lo que son fáciles de transportar de un lado a otro.
Son básculas para pesar grandes cargas. De hecho, es posible usarlas junto a una rampa accesoria que permite subir la mercancía más fácilmente. Estas suelen consistir o bien en una plataforma antideslizante, o bien en dos barras separadas que se ponen bajo la carga a pesar.
Son las clásicas básculas o balanzas electrónicas de mesa, pensadas para pesar piezas o paquetes ligeros de tamaño mediano o pequeño.
Estas se usan para, además de pesar, contar piezas. Para ello, usan el peso de una pieza como referencia. De esta manera, resulta mucho más sencillo y rápido el contaje de piezas pequeñas como tornillos, tuercas, etc.
Estas básculas de pesaje destacan por contar con un soporte de altura para poder visualizar o alcanzar las teclas de función más fácilmente. La plataforma de pesaje está a baja altura para que el esfuerzo de levantar las mercancías sea el mínimo.
El rango de pesaje hace referencia al peso mínimo que pueden detectar y al peso máximo que estas básculas pueden soportar:
Podemos encontrar dos formas de alimentación de las básculas. La más habitual es con pilas, aunque algunos modelos disponen también de un acumulador o batería recargable. Normalmente, estos últimos pueden, además, funcionar directamente conectados a la red eléctrica. La duración de la batería cambia de un modelo otro, pero algunos cuentan con una autonomía de hasta 60 horas, es decir, que aguantarán varias jornadas de trabajo.
Las funciones pueden variar de un modelo a otro. Las más habituales son:
Por lo que a equipamiento se refiere, todas las básculas vienen con una pantalla de visualización donde podremos ver el resultado del pesaje y la función que tenemos activada. Algunos modelos de grúa vienen con mando a distancia, ya que es fácil que acaben a gran altura y que la báscula, pues, no esté al alcance de la mano. Estas también pueden incluir una cinta métrica. Finalmente, las hay que disponen de una interfaz de conexión a impresora u ordenador para poder imprimir o guardar los resultados obtenidos.
A pesar de los diferentes tipos de básculas, los materiales suelen ser muchas veces los mismos. Además, destacan porque los materiales empleados hacen que sea muy sencillo limpiar correctamente estas herramientas. El más presente es el acero, tanto en las plataformas de pesaje como en los ganchos en el caso de las colgantes; es muy resistente y capaz de soportar grandes cargas. Además, en el caso del acero inoxidable, aguanta bien la corrosión. Algunos modelos cuentan con certificación de protección al polvo y al agua, lo que los hace aptos para uso interior y exterior.