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Son muchos los aparatos eléctricos que incorporan baterías de iones de litio que necesitan recargarse con regularidad: las podemos encontrar desde en un smartphone u ordenador portátil hasta en un vehículo para taller como una apiladora o una transpaleta. Aunque los ámbitos de aplicación son diversos, todas tienen algo en común: deben cargarse regularmente. Es importante hacerlo correctamente para garantizar que estas baterías duren el mayor tiempo posible. En nuestra guía le mostramos qué hay que tener en cuenta, qué evitar y cómo proceder para que su carretilla industrial esté lista para usarse el mayor tiempo posible.
¿Qué hay que vigilar al cargar una batería de iones de litio?
Tanto para prolongar la vida de la batería como para evitar daños graves, es importante tener en cuenta una serie de aspectos:
- Posibilidad de carga nocturna
Aunque hace un tiempo se recomendaba no poner a cargar los dispositivos electrónicos con batería de litio durante toda la noche, hoy en día se puede hacer sin problema, incluso en el caso de las carretillas industriales. Nuestras unidades de almacenamiento de energía están diseñadas para recargarse durante las horas nocturnas sin que por ello se acorte su vida útil. También se pueden realizar cargas parciales sin que afecten negativamente a su capacidad de almacenamiento.
- Sin posibilidad de sobrecarga
En principio, las baterías de litio se pueden recargar completamente. Las que se encuentran en las transpaletas y apiladoras eléctricas incorporan un sistema de gestión que, entre otras cosas, garantiza una carga cuidadosa y correcta.
- Evitar la descarga profunda, aunque no sea problema para apiladoras y transpaletas
La descarga profunda de una batería es la descarga completa, es decir, hasta que se agota totalmente su capacidad. Si se da el caso, el voltaje de la batería cae por debajo del voltaje de descarga, lo que a veces puede llegar a destruirla. En el caso de las baterías de iones de litio, este es de 2,5 voltios, y, en las de polímero de litio, es de 3,3 voltios. Las razones por las que se puede dar una descarga profunda pueden ser múltiples: un cargador defectuoso, un fallo en el apagado automático y, en el caso de vehículos, también un cortocircuito o un alternador defectuosos. No obstante, en el caso de las transpaletas y las apiladoras con batería de iones de litio, esto no sucede, ya que llevan un sistema de seguridad integrado.
- Evitar las temperaturas extremas
Las baterías de iones de litio son muy sensibles a la temperatura. Los dispositivos equipados con estas baterías no deben exponerse a temperaturas superiores a los 40° C ni inferiores a los -10° C. Tampoco deben recargarse a esas temperaturas.
- Nunca almacene las baterías vacías
Para almacenar las baterías de iones de litio de forma óptima, primero deben cargarse hasta un 50-70 % de su capacidad. Si se almacenan a temperaturas de entre 15 y 18° C, siguen siendo eficientes incluso durante largos periodos de tiempo. Esto también reduce el riesgo de descargas profundas. Los armarios especiales para sustancias peligrosas ofrecen una alternativa segura para su almacenaje, aunque no son imprescindibles para su recarga.
¿Existe el efecto memoria en el caso de las baterías de iones de litio?
El llamado efecto memoria ha tenido, en el pasado, un impacto negativo en la capacidad de las baterías recargables. Este se desencadena por la descarga parcial frecuente de la batería, lo que provoca una caída de tensión prematura, en la que la tensión de la celda cae por debajo del requisito mínimo del dispositivo. El acumulador “memoriza” el nivel de carga de la descarga parcial y posteriormente solo proporciona una capacidad de almacenamiento reducida, de acuerdo con esa memoria. Las descargas parciales posteriores aumentan este efecto.
A pesar de cargar suficientemente la batería, su rendimiento disminuye: la máquina o aparato ya no puede utilizarse durante el tiempo habitual y la batería debe recargarse con mucha más frecuencia. Si el efecto memoria es muy acusado, la batería puede llegar a ser inservible mucho antes del final de su vida útil.
Las baterías de iones de litio más modernas no sufren un efecto memoria significativo. Es más probable encontrarlo en las baterías de níquel-cadmio o en las baterías de níquel-metalhidruro más antiguas. Investigadores del Instituto Paul Scherrer de Suiza y del laboratorio de investigación japonés de Toyota pudieron observar este efecto en las baterías de litio ferroso (LiFePo). Sin embargo, descubrieron, mediante una serie de pruebas, que el cambio de voltaje se produce en rango de milésimas, es temporal y puede revertirse con un período de espera entre la carga parcial y la descarga completa. En el caso de las baterías de iones de litio de las carretillas industriales de Jungheinrich, estas no sufren ningún efecto memoria.
¿Se debe cargar parcialmente una batería de iones de litio?
Aunque una batería de iones de litio siga teniendo potencia, se pueden hacer cargas intermedias en cualquier momento. De esta manera, se pueden aprovechar las pausas de trabajo para hacer recargas parciales de los vehículos alimentados mediante este tipo de baterías, como, por ejemplo, las apiladoras eléctricas. En cualquier caso, asegúrese de apagar el cargador antes de separar la batería del aparato.
Si la batería se carga con frecuencia de forma parcial, es importante realizar una carga completa cada 4 semanas. Esto garantiza un funcionamiento fiable. También hay que cargar la batería completamente antes de usarla por primera vez.
Preguntas frecuentes sobre la carga de baterías de litio
El efecto memoria es una pérdida de la capacidad de almacenamiento causada por la descarga parcial frecuente de la batería. Se puede producir en las baterías de níquel-cadmio o en las baterías de níquel-metalhidruro que se utilizaban hace un tiempo. En esos casos, hay que descargar siempre la batería completamente antes de recargarla. Con las baterías de iones de litio modernas, no se produce un efecto memoria perceptible.
No. El diseño y el funcionamiento de las baterías de iones de litio utilizadas para el funcionamiento de las carretillas industriales evitan la sobrecarga. El sistema de gestión de la batería (BMS) integrado garantiza un proceso de carga óptimo.
No, la descarga completa no es necesaria. Puede recargar una batería de iones de litio en cualquier momento sin tener que descargarla primero. Los ciclos de carga plana con una capacidad de entre aproximadamente el 30 y el 80 % son los más adecuados.
Si la batería de litio no carga o no lo hace completamente, puede haber varias razones:
• la batería está defectuosa
• el cargador y la batería no están conectados correctamente
• el cable del cargador está defectuoso
• el cargador es incompatible
• la batería es demasiado vieja
• la temperatura ambiente es demasiado alta o baja
Así pues, si esto le pasa, compruebe todas estas posibles causas. Si la batería está defectuosa o anticuada, no suele merecer la pena repararla. En ese caso, debe ser sustituida por una nueva.
La frecuencia con la que se puede cargar una batería de iones litio dependerá de cómo se cuide. Si siempre carga la batería de su transpaleta o apiladora correctamente puede alcanzar hasta los 3.000 ciclos de carga. Las baterías de polímero de litio, que cuentan con una mayor densidad de energía, tienen una vida ligeramente más corta con 300-500 ciclos de carga.
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